Una de las mayores preocupaciones de nuestros días es qué podemos hacer en nuestro día día para no dañar el medio ambiente.
De las tres R a las 7R
Todos hemos escuchado en alguna ocasión hablar de las 3 R, las repetimos una vez más: Reducir, Reutilizar y Reciclar. Este eslogan se ha quedado corto y se deben añadir más “erres”. Estos últimos 30 años, a nuestra sociedad le ha salido más barato el consumo basado en una economía lineal que plantearse que la sobreproducción sería un problema que nos atañiría más adelante, como ahora. Dicha economía se centraba en la creación de un producto, en su compra, su uso y, finalmente, su deshecho. ¿Cuántas veces no habremos escuchado que sale más rentable comprar un producto que reparar el roto?
Por ello, las 4 erres que se añaden al mantra del reciclado pasan por Rediseñar el producto, Reducir, Reutilizar, Reparar, Renovar, Recuperar y Reciclar.
El rediseño pasa por introducir en el diseño del producto criterios que sean menos dañinos para el medio ambiente; reducir el consumo de productos innecesarios; reutilización de envases como pueden ser los de vidrio; reparar antes que tirar, renovar objetos para las funciones que se habían creado, recuperar materiales que ya han sido utilizados para darles una nueva vida y finalmente reciclar, que el residuo vuelva al tejido productivo como materia prima.
Eco Eventos
En el ámbito de los eventos, se debe tener en cuenta la capacidad del espacio para adaptarse a las medidas de ahorro energético. Siempre hay elementos que dependen de nosotros como el uso de iluminación led o el ajuste de la temperatura, la cual se deberá variar en función de si es verano o invierno.
Cáterings comprometidos
Otro elemento a tener en cuenta son los caterings. Los caterings deben tener en cuenta dos factores muy importantes. Por un lado, la utilización de material reutilizable, en lugar de vasos de cartón para el café, tazas de porcelana que se pueden lavar, por ejemplo. Por el otro lado, hay otro factor muy importante, y este, es la materia prima con la que trabaja el catering. Debemos tener en cuenta que en muchas ocasiones, los productos que tenemos en el plato, han hecho más kilómetros que nosotros el último año. Por ello, debemos tener en cuenta que la materia prima con la que trabaje el catering debe ser de temporada y, por ende, de Km0.Bajo esta premisa, podemos encontrar propuestas como las de Krisalia o Cuina Justa. El cátering Krisalia ha tomado partido optando tanto por los productores locales de alimentos como por la reducción de desperdicio alimentario.
Cuina Justa nace en 2005 gracias a la Fundación Cassià Just, la cual promueve la incursión en el mundo laboral de personas con fragilidad mental, y desde 2012 cuenta con campos propios, lo cual, asegura que una gran parte de los alimentos sean de Km0.
Así que os animamos a dar un paso más y tomar perspectiva.Tomar conciencia y pensar que nuestras pequeñas decisiones pueden marcar la diferencia. Tales como optar por el uso de transporte público en lugar del particular; al hacer la compra llevar bolsa de tela en lugar de usar una de plástico o evitar el uso de embalajes innecesarios, premiando las marcas que lo hacen de manera sostenible.
Nuestras pequeñas acciones pueden contribuir a un cambio global.