LA CASA DE LA SEDA
La Casa de la Seda es la única casa gremial de Barcelona abierta al público con visitas guiadas. Tiene además, preciosos espacios para eventos que requieran de un lugar especial donde celebrar desde reuniones corporativas a todo tipo de eventos privados.
Tanto el exterior como el interior de la casa, con más de trescientos años a sus espaldas, hacen gala de una elegancia y solemnidad a la altura del esplendor histórico y la representación social que los gremios integrantes alcanzaron durante el siglo XVIII, su época más brillante.
La Casa de la Seda es un monumento de visita obligada en Barcelona por muchas razones:
- Situación privilegiada en el corazón de Barcelona
- Documentos y pergaminos del S.XVI
- Hermosas paredes forradas de fina seda
- Gran valor arquitectónico y artístico del edificio
- Una apasionante historia que se remonta a la Edad Media
No es de extrañar que en 1919 el edificio fuese declarado Monumento arquitectónico-artístico de interés nacional y que en 1929 ganase la Medalla de Oro de la Ciudad de Barcelona.
La sede del Colegio del Arte Mayor de la Seda llegó a ser motivo de envidia en la sociedad de su tiempo y hoy abre sus puertas para que todos podamos disfrutar de tan codiciado legado.
EXTERIOR
A simple vista destaca la ornamentación de la fachada con unos esgrafiados que muchos han calificado como los más bonitos de la ciudad. Aunque se desconoce la autoría, no es difícil adivinar la habilidad técnica y la categoría del artista. Demostró tener una gran destreza para transmitir un preciso efecto corpóreo en las gigantescas figuras de cuatro metros de altura, siguiendo el modelo de representación clásico de cariátides y atlantes. También cabe destacar las molduras excepcionales que enmarcan ventanas y balcones de inspiración barroca.
En el balcón de la esquina podemos observar una hornacina donde está Nuestra Señora de los Ángeles, patrona y protectora de los veleros. A sus pies, los ángeles están situados en forma de media luna identificándose todos y cada uno de ellos. Se trata de una composición claramente con un fuerte concepto de movimiento. La obra es del escultor Joan Enrich realizada en 1760.
Por la parte de la Plaza de Lluís Millet, entre 1928 y 1932, el edificio fue ampliado por el arquitecto Jeroni Martorell, siguiendo las líneas del antiguo edificio. El estucador Ferran Serra hizo unos nuevos esgrafiados imitando los antiguos.
INTERIOR
Las diferentes salas del interior de la Casa de la Seda acogen multitud de piezas de fina ebanistería, paredes forradas de seda y otros elementos decorativos que en su conjunto rematan el estilo, el lujo y la distinción que les caracteriza, acorde al tipo de reuniones que se solían celebrar por la Junta General de Comercio y Gremios. Se llegaron a tomar decisiones de gran relevancia comercial y política, hasta el punto que en la Barcelona del siglo XVIII se confundían a los veleros con la dirección de los gremios. El paso de Semana Santa del siglo XVIII del Misterio de la Santa Espina preside el salón gremial, sin duda la sala más espectacular de la casa. Esta vinculación con ciertos aspectos de la vida religiosa otorgaba al gremio aún más importancia en la sociedad de su tiempo.
Se conservan también piezas relevantes en otras salas, como un Cristo de marfil del siglo XVIII en la sala de la presidencia o como el armario de 1683 ornamentado con pinturas florales y religiosas de la Cofradía de los Maestros de los Veleros.
Por último, cabe mencionar el valioso archivo histórico de la biblioteca cuyo contenido conserva la historia gremial, parte indudable de la historia de la ciudad de Barcelona. Hay más de tres mil documentos desde 1533 hasta hoy en día así como un archivo fotográfico de ochenta álbumes y cinco mil fotografías que recogen los acontecimientos organizados en el colegio desde principios del siglo XX.